En Cáceres, cuando alguien menciona la Familia Dioce, no está hablando solo de un colegio, sino de un sentimiento que va más allá de las aulas.
Es ese orgullo compartido por quienes forman parte de la gran comunidad del Colegio Diocesano José Luis Cotallo: alumnos, familias, profesores, personal del centro y antiguos alumnos. Pero, ¿qué hace tan especial a la Familia Dioce?
Un sentimiento que une
La Familia Dioce no es un concepto formal, sino un sentimiento de pertenencia que se vive día a día en el colegio.
Cada actividad, cada proyecto y cada celebración contribuyen a crear una comunidad donde los valores y la educación integral son el centro.
Es algo que trasciende las generaciones, uniendo a quienes han pasado por el Dioce y a quienes siguen viviendo su experiencia en el presente.
Este sentido de unidad es lo que distingue a la Familia Dioce de otras comunidades educativas.
Aquí, no solo compartimos un espacio físico, sino un compromiso con la formación humana y cristiana de nuestros hijos.
Todos los miembros, desde los más pequeños hasta los exalumnos, mantienen vivo el vínculo que une a esta gran familia, cultivando relaciones basadas en el respeto, la solidaridad y la empatía.
Educación en valores religiosos
Uno de los pilares fundamentales de la Familia Dioce es la formación en valores basados en el humanismo cristiano.
Este enfoque no solo está presente en las aulas, sino también en actividades solidarias que inspiran a los alumnos a pensar en los demás y a actuar con empatía y generosidad.
Ser parte de la Familia Dioce significa aprender a ser mejores personas mientras se crece académicamente.
Nuestros estudiantes no solo desarrollan su intelecto, sino también su carácter y sus valores, preparándolos para ser ciudadanos responsables y compasivos.
Las iniciativas solidarias como la Carrera Solidaria o el Bocadillo Solidario, vinculada a organizaciones Manos Unidas o la Asociación ELA Extremadura, son ejemplos perfectos de cómo enseñamos a los niños a poner en práctica esos valores fuera del aula, apoyando a quienes más lo necesitan.
Encuentros que fortalecen la comunidad
Durante el curso, el Dioce organiza encuentros y actividades pensadas para las familias.
Desde reuniones en el seminario diocesano, que refuerzan el sentido de comunidad, hasta eventos y proyectos que reúnen a todos los que forman parte del colegio, estos momentos se convierten en recuerdos inolvidables que refuerzan el lazo entre los miembros de la Familia Dioce.
La relación constante entre profesores, alumnos y familias hace que nuestra comunidad se fortalezca.
Estos encuentros no son solo para compartir experiencias educativas, sino para consolidar una red de apoyo mutuo, en la que cada miembro se siente respaldado y acompañado en su proceso de crecimiento.
Más que un colegio: un estilo de vida
El orgullo de pertenecer a la Familia Dioce se extiende más allá del colegio. La conexión con el club de fútbol vinculado al Dioce, aunque abierto a todos, es un ejemplo perfecto de cómo la comunidad se expande.
Tanto en el campo de juego como en las gradas, el espíritu de equipo y la unión se sienten más fuertes que nunca.
Este espíritu de pertenencia se vive también en las actividades extraescolares, en los eventos deportivos y en los proyectos nacionales e internacionales que fortalecen la conexión con otros colegios y culturas.
Las actividades como el Camino de Santiago o las misas familiares contribuyen aún más a esta unidad y aprecio mutuo.
¿Por qué todos hablan de la Familia Dioce?
La Familia Dioce es más que un tema de conversación; es una forma de identificarse con valores, tradiciones y un legado que ha crecido con el tiempo.
Hablar de la Familia Dioce es hablar de orgullo, pertenencia y una educación que va más allá de los libros de texto.
La Familia del Diocesano es sinónimo de compromiso social, excelencia educativa y solidaridad.
Es un referente en la ciudad, y las familias que eligen nuestro colegio no solo lo hacen por su nivel académico, sino por todo lo que representa: valores sólidos, unidad familiar y un fuerte sentimiento de comunidad.
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Ser parte de la Familia Dioce es un privilegio, y te aseguramos que aquí encontrarás todo lo necesario para el crecimiento académico y personal de tus hijos.